Eres peligrosa por tu crueldad,
eres como un agujero negro,
todo lo que su atracción mete dentro
se destruirá sin poderlo sacar.
Eres luz ardiendo con toda intensidad
que porta arrasador fuego,
que atrae como el imán al hierro
pero te funde sin piedad.
Como lo puedo evitar
caer entre tus redes preso,
pasar sobre ti como el viento
sin que me alcance su maldad.
Soy un hombre sin voluntad
y cada vez que te contemplo
sólo añoro entrar en tu templo
sin pensar lo que tendrá.
Me torturas sin más
cada vez que a ti me acerco
y me ahogo y desespero
por no poderlo olvidar.
Mala bestia, mal rapaz
que en tus garras muero,
que por no poder remontar vuelo
sucumbo bajo tu ansiedad.
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