sensación inadecuada,
reconocer al amigo
de otra vida ya lejana.
El sonido de su voz,
su penetrante mirada,
late fuerte el corazón
que inunda el alma.
Compañero de otros tiempos,
de otros mundos, de otras causas,
perdido en los recuerdos
que la muerte tapara.
Reapareció frente a ti,
pero él no sabe nada,
el olvido hizo festín
en su vida ya pasada.
Amigo de nuevo al fin
sentiste al contemplar su cara,
otro semblante, otro vivir
pero con su inmortal alma.
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